El dengue es una enfermedad transmitida por la picadura de mosquitos infectados y podemos prevenirlo con acciones sencillas. Mantener limpios nuestros hogares y espacios públicos es clave para evitar la reproducción del mosquito transmisor.

Es importante lavar las paredes de los contenedores de agua, tapar recipientes donde se almacena agua, voltear cualquier objeto que pueda acumular líquido y tirar basura o artículos en desuso que puedan convertirse en criaderos. También colocar mosquiteros en puertas y ventanas, así como usar repelente antes de salir de casa.

Depositar la basura en su lugar y mantener las áreas limpias contribuye a reducir el riesgo de dengue y permite cuidar a nuestra familia.

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